Nunca llueve eternamente.

A veces poeta, dramaturgo, guionista, cineasta, pero tristemente humano.

Los heraldos que dejaste en mí


Poema en homenaje al Día del Poeta Peruano
(15 de abril: fallecimiento de César Vallejo en París)

Soberano de la prosa, príncipe de los poetas sufridos;
he de tenerme hoy con unos versos en tu memoria.
Vallejo, sabio conocedor del dolor humano, fungido
dentro de la soledad que destella el mundo sin amor.

Poeta de tu azul melancolía que comprendo como mía,
de tu París querido, de tu hambre, de tu amado Trilce, de tus ojos
color azabache que brillan como si hubieran lágrimas en ellos,
de tu puño y letra que brotan pinceladas del arte purificado;

déjame decirte, ¡Oh vate universal!, dichosos los que saben
apreciar la profundidad de tu hermenéutica poética.
¿Qué hubiera sido de mi? Si no te hubiera leído,
Si no hubiera conocido mi ánima esa evangélica

metafísica que renovó toda la poesía contemporánea.
Aunque pasen muchos siglos y se haya llorado muchas
perdidas en la literatura. Siempre quedará nuestro Vallejo.
Gracias poeta por hacer de este noble hombre de letras

un ser sobreviviente que intenta ser parte de una minoría,
de esa minoría que se apasiona por la escritura y que en ella
surge la exhibición impúdica de los más altos sentimientos
que conlleva estar casado de por vida con la poesía.